- La industria española de automoción tiene una oportunidad única de consolidar su papel de liderazgo en el desarrollo de la movilidad autónoma y la movilidad conectada gracias a sus múltiples ventajas estratégicas.
- Detallamos las tres grandes prioridades estratégicas para identificar y potenciar los aspectos diferenciadores del ecosistema de automoción y movilidad español en el ámbito de la Movilidad Cooperativa, Conectada y Automatizada.
La movilidad autónoma y la movilidad conectada reconfigurarán en un futuro cercano nuestra forma de viajar y movernos. Los automóviles del futuro albergarán nuevas tecnologías, componentes inteligentes y funcionalidades que modifiquen la experiencia de usuario. Lo harán gracias a la conectividad y la automatización, incrementando el confort y la seguridad de los ocupantes, siendo medioambientalmente sostenibles.
En esta línea, la Movilidad Cooperativa, Conectada y Automatizada (en adelante CCAM) es un enfoque integrado de la movilidad que combina la cooperación entre vehículos, la conectividad a través de las tecnologías de comunicación y la automatización de funciones de conducción. Los vehículos pueden comunicarse entre sí, con la infraestructura vial y con otros usuarios. Esto permite una nueva forma de coordinar y cooperar la gestión del tráfico y la movilidad.
Durante el tercer desayuno de prensa «Tecnologías de Automoción ‘Made in Spain’. Camino a la autonomía Estratégica” organizado por la Plataforma Tecnológica de Automoción y Movilidad – Move2Future (M2F), coordinada por SERNAUTO, hemos podido conocer de primera mano cuáles son las prioridades y estrategias de nuestra industria en este ámbito.
Factores que afectan a la movilidad autónoma y la movilidad conectada
Las nuevas soluciones de movilidad impulsadas por la CCAM traerán numerosos beneficios para toda la ciudadanía en términos de seguridad, medioambiente, inclusión y competitividad. Sin embargo, su despliegue todavía no se ha producido debido a que existen factores, más allá de los retos tecnológicos, que no lo permiten. En ellos es necesario realizar un mayor esfuerzo:
- Demanda insuficiente por el desconocimiento de las virtudes de la CCAM por gran parte de la sociedad.
- Bajos niveles de inversión en I+D, debido a la fragmentación dela financiación pública en I+D y la inversión privada en tecnologías CCAM.
- Madurez tecnológica insuficiente de las soluciones CCAM para su transferencia al mercado y adopción generalizada.
- Falta de una visión y estrategia común y a largo plazo que tenga en cuenta a todos los agentes implicados.
- Limitadas acciones piloto y de demostración, debido a la necesidad de una cadena de valor intersectorial amplia y bien coordinada. Esto requiere de una gran interacción entre las partes interesadas públicas y privadas.
Por lo tanto, para vencer estos factores y acelerar el despliegue de la CCAM, es necesaria la coordinación entre todos los agentes y usuarios implicados en la I+D+i, la normalización y la reglamentación. Solo de esta forma es posible que las inversiones a nivel local, regional, nacional y de la UE, públicas y privadas, se complementen entre sí.
Europa tiene una oportunidad única de consolidar su papel de liderazgo en la CCAM frente a la creciente competencia en las cadenas de valor y los mercados mundiales. Y en este punto, la industria española juega un papel relevante por la fortaleza de su sector automoción, sus compañías multinacionales líderes en innovación, desarrollo y fabricación de componentes; la amplia diversidad de condiciones de conducción, la presencia de entidades relevantes y las exitosas experiencias previas en la materia.
Prioridades estratégicas de nuestra industria para liderar la CCAM
La Agenda de Prioridades Estratégicas de I+D+i del Sector Automoción y Movilidad de M2F detalla las prioridades estratégicas para identificar y potenciar aquellos aspectos diferenciadores del ecosistema de automoción y movilidad español para lograr un posicionamiento destacado en el ámbito de la CCAM.
ADAS y movilidad autónoma
El primer pilar se centra en ampliar y mejorar los sistemas ADAS y la conducción autónoma. Para ello, la industria de automoción nacional debe:
- Desarrollar nuevas arquitecturas que permitan una mayor integración y procesamiento de datos en tiempo real.
- Trabajar en la ampliación de los Operational Design Domains (ODD).
- Desarrollar sistemas avanzados basados en inteligencia artificial, como el aprendizaje profundo.
- Buscar sistemas de interacción hombre-máquina más sofisticados.
- Definir el framework para la validación y verificación de sistemas de ayuda a la conducción, garantizando la seguridad funcional y la ciberseguridad.
Movilidad conectada e infraestructura inteligente
El desarrollo de tecnologías de comunicación avanzadas (5G, 6G y 7G) facilitarán una comunicación segura y confiable entre los vehículos, infraestructura y servicios externos.
Adicionalmente, se deben adaptar las infraestructuras viales a la movilidad autónoma, instalando sensores y sistemas de gestión del tráfico que optimizan el flujo vehicular.
Por último, se proponen nuevos servicios y aplicaciones relacionados con la movilidad, que mejoren la experiencia del usuario, promoviendo desplazamientos más eficientes y confortables.
Gestión de movilidad: urbana, interurbana, transporte público y MaaS
En este ámbito, se proponen soluciones para una gestión eficiente de las flotas de vehículos autónomos. Concretamente, soluciones de seguimiento, control y planificación de rutas optimizadas.
Asimismo, se promueven modelos de movilidad compartida, como el carsharing. Estos reducen el volumen de vehículos en propiedad, reducen la congestión de las ciudades y contribuyen a una movilidad más sostenible.
Por otra parte, se busca la integración de diferentes modos de transporte en plataformas y aplicaciones, facilitando la planificación y reserva de viajes multimodales. Con ello se logra una mayor eficiencia en el uso de los vehículos y una transición más fluida entre diferentes modos de transporte.
Esta estrategia permitirá avanzar en la transformación de la movilidad y el despliegue de la conducción autónoma y conectada. Además, fortalecerá la posición de España como un actor relevante en este campo, generando oportunidades de crecimiento económico y empleo en el sector de la automoción y la movilidad.
En definitiva, tendrá un impacto positivo en el empleo, la sociedad, el medioambiente, la competitividad y el potencial de innovación e investigación nacionales.