Consejos de mantenimiento preventivo para evitar averías en verano

  • La época estival pone a prueba los diversos componentes de tu vehículo. Las altas temperaturas y la climatología del mar y la montaña pueden producir averías, especialmente en los vehículos con más de 10 años.
  • Si quieres evitar averías en verano, chequea tu vehículo y lleva a cabo un mantenimiento preventivo en talleres de confianza y apostando siempre por recambios originales.

Llega la época estival y, con ello, las altas temperaturas y los viajes veraniegos. A la hora de preparar sus vacaciones, muchos usuarios planean con mimo el destino o la residencia, pero no todo el mundo le presta a su vehículo la atención que necesita. Llevar a cabo un mantenimiento preventivo antes de salir de viaje es la mejor forma de evitar averías en verano y, con ello, un disgusto para la familia.

Durante estos meses, nuestros vehículos no solo tendrán que hacer frente a temperaturas superiores a los 30 grados. En muchas ocasiones también estarán sometidos a un elevado número de kilómetros y las condiciones climatológicas de las zonas costeras o de montaña. No todo el mundo sabe que la arena de la playa, la sal o el polvo en las zonas de montaña pueden afectar a los vehículos.

Esto es especialmente importante en los coches que tienen una antigüedad de entre 10 y 15 años. Estadísticamente, son los que representan el mayor porcentaje de coches averiados en esta época del año. Por esa razón, te ofrecemos una serie de consejos de mantenimiento preventivo para el coche que te permitirán evitar averías en verano.

¿Quieres evitar averías en verano? Estas son las más frecuentes

La falta de mantenimiento provoca un aumento de las averías, sobre todo en verano, cuando más kilómetros recorremos. Principalmente, son problemas que afectan a las baterías, a los neumáticos, al motor y al alternador, pero existen muchas otras.

Te contamos cuáles son las más frecuentes para que puedas tomar medidas preventivas y así evitar averías en verano:

  • El aire acondicionado: en verano es cuando hacemos un mayor uso del aire acondicionado del vehículo. Las altas temperaturas a las que están sometidas los componentes del vehículo, así como un mayor uso del sistema, podrían producir una fuga de gas refrigerante debido al desgaste de las tuberías que transportan el aire. También puede ocurrir que los filtros estén obstruidos.
  • Los neumáticos: en verano, la temperatura del asfalto puede ser hasta 10ºC superior a la temperatura ambiente, ya de por sí elevada. Por ello, el caucho de los neumáticos se reblandece y se vuelve menos resistente. La falta de un mantenimiento preventivo puede hacer que la presión de los neumáticos no sea la correcta, las rodaduras se calienten excesivamente y se produzcan un mayor desgaste y consumo de combustible.
  • El motor: es el corazón del vehículo, así que debe estar siempre a punto para evitar averías en verano. Las más frecuentes se dan en relación con el líquido refrigerante. Si el termostato o el electroventilador están fallando porque falta líquido refrigerante o este no se está transportando como se debe, se puede producir un sobrecalentamiento y una avería realmente costosa.
  • La válvula EGR: en los meses de verano hay una mayor concentración de partículas que pueden colapsar la válvula.
  • La batería y el alternador pueden verse afectados debido a las altas temperaturas y a un uso más intensivo del sistema eléctrico.
Oficial de taller de mantenimiento y reparación
Se acercan las vacaciones y es momento de planear las escapadas. Haz un mantenimiento preventivo a tu vehículo para evitar averías este verano.

Consejos de mantenimiento preventivo para tu vehículo

Para evitar averías en verano que puedan arruinar tus vacaciones, presta atención a estos consejos de mantenimiento preventivo:

  • Revisa el aire acondicionado: chequea que las tuberías se encuentran en buen estado, así como los filtros del aire. Detectarás un problema si el aire acondicionado no funciona o no enfría correctamente.
  • Comprueba los neumáticos: es importante hacer un mantenimiento preventivo tanto del estado como de la presión de los neumáticos.Asegúrate de que la presión está entre los niveles recomendados por el fabricante. Así mismo, revisa la profundidad y estado del dibujo.
  • Chequea el motor y las suspensiones en un taller mecánico.  Nunca está de más hacer una revisión en profundidad antes de salir de viaje para evitar quedarse tirado en la carretera por una avería grave.
  • Comprueba la iluminación: durante el invierno, le habrás dado un mayor uso al sistema de iluminación. Asegúrate de que no hay luces fundidas o pilotos rotos que reduzcan tu visibilidad.
  • Repaso a líquidos y filtros: es importante comprobar que los niveles de líquido de frenos, aceite, refrigerante y limpiaparabrisas se encuentran en los niveles recomendados. De igual forma, asegúrate de que los filtros de aire, aceite y combustible están limpios y en buen estado. Recuerda hacerlo con el motor apagado, en frío y con el coche en llano.
  • Controla el sistema de frenado: el sistema de frenado del vehículo es vital para tu seguridad. Al actuar por fricción, alcanza elevadas temperaturas que se suman a la alta temperatura ambiente. Revisa que el estado de las pastillas y de los discos es el correcto.
  • Estado de la batería: las altas temperaturas afectan a la batería del coche. Comprueba su estado para cerciorarte de que no te quedarás sin batería antes o durante tus viajes de verano.

Más vale prevenir que curar. Ahora que conoces nuestros consejos de mantenimiento preventivo, mejor no te la juegues. Si quieres evitar averías en verano, lleva tu vehículo al taller para un chequeo y recuerda: apuesta siempre por talleres de confianza y recambios originales. Que una avería no arruine tus vacaciones.

Compartir

Últimas entradas

Artículos relacionados

Los retos de la movilidad urbana del futuro requieren una estrategia-país que garantice la supervivencia del sector de automoción post-COVID y su posicionamiento global.